La cuenta atrás para la
celebración de la Navidad ya ha empezado, y para llevar bien la cuenta qué
mejor manera de hacerlo que con un calendario
de adviento. Los calendarios de adviento tienen su origen en el siglo XIX,
en Alemania, donde se encendía una vela cada día desde el domingo de adviento hasta
el día 24. En la actualidad se han
popularizado y desde los años 20 la tradición de hacerlos poniendo chocolatinas y haciendo la espera más dulce a los niños se ha hecho habitual.
De los miles de calendarios de
adviento que se pueden comprar o hacer, y que se pueden ver por la red, hay
algunos que me han parecido muy originales y tienen ese ”algo” que los hace,
a mis ojos, merecedores de ser compartidos y admirados. Algunos los he elegido por su sencillez, otros por su color, o por el trabajo que llevan detrás, o por el resultado final, sorprendente e imaginativo. Estos son sólo algunos, y son...
¿Cómo son vuestros calendarios de adviento? ¿de los trabajados con muchas horas invertidas, o más bien de los sencillitos, pero con mucho encanto?
